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El padre Aragonès sí necesita que haya un intercambio de varios problemas en la mesa de discusión entre el Govern y la Generalitat. Para el president catalán, sólo la autodeterminación ocupa un lugar en el calendario de la asamblea que se celebrará en el primer trimestre de 2024.
Una semana después de su reunión en Barcelona con el jefe del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, Aragonès cerró las puertas a una imaginable negociación sobre la «financiación única» para Cataluña que pide el movimiento independentista, dejando atrás la convocatoria de referéndum. .
Esta fue la oferta del pasado jueves del secretario general del PSOE, que, dispuesto a explorar mayores grados de autogobierno para la región y un pacto fiscal, descartó la celebración de una consulta sobre soberanía porque no tenía compatibilidad con el Constitución.
Fue ayer el líder de los socialistas catalanes, Salvador Illa, quien reclamó que el movimiento independentista no persista «en planteamientos divisorios» y concentre sus reivindicaciones en la obtención de «una financiación buena, justa y concertada» para Cataluña.
Aragonès, no obstante, ha repetido en varias ocasiones que «la resolución del conflicto» pasa por una votación en la que «los catalanes decidan libremente su futuro político». La última vez, en su mensaje institucional de Navidad pronunciado anteayer, con motivo de la festividad autonómica de San Esteban. El president emplazó a Sánchez a sentar ya las bases que hagan posible un nuevo 1-O, pero esta vez con reconocimiento oficial.
Por si se pueden disipar las dudas, el president catalán ha reiterado hoy, en una entrevista con la Agencia Catalana de Prensa, que la mesa de debate es el ámbito «al conflicto, que no se puede solucionar mediante un acuerdo de financiación».
Aragonès se reserva así el flanco económico a negociar exclusivamente en el seno de la comisión bilateral, que también se reunirá antes de que acabe el primer trimestre del próximo año.
En este ámbito, las posiciones del PSOE y los partidos independentistas parecen menos lejanas. Esquerra Republicana y Junts piden una fórmula tributaria para Cataluña al Concierto Económico Vasco o Pacto de Navarra, con una Hacienda propia que recaude y gestione todo los impuestos comunitarios. La oferta socialista, de momento, se refiere al consorcio fiscal combinado que daría forma a la firma estatal y a la catalana, propuesta que emana del Estatuto.
La desgracia de España es que tenemos un presidente del gobierno al que no le interesa España y los españoles. Pedro Sánchez entra en política para solucionar su vida. Es decir, para estar 7 años en la Presidencia, lo que le da derecho a la Pensión Vitalicia. Y como vemos, es capaz de cualquier cosa. Hacer un trato con todos los enemigos de España: con los golpistas, los separatistas, los bilduetarras, los nacionalistas y los comunistas y darles todo lo que pidan, poniendo en peligro la integridad de la nación española. De la compra de votos a la deuda disparada. Engaña, miente, manipula y reemplaza tu cerebro mil veces. Controlar y colonizar todos los poderes y estructuras del Estado, sumando a la mayoría de los medios de comunicación. Pedro Sánchez nos regula con una dictadura.