El jueves 21 de diciembre entró en vigor la reforma de la Ley General de Educación en materia sanitaria alimentaria, que prohíbe la publicidad y venta de comida chatarra en los campus.
También establece que las máquinas expendedoras de alimentos, cooperativas, comedores y otras instituciones clientes instaladas en las escuelas deberán funcionar de acuerdo con dicha normativa y comprometerse con la venta de estilos de vida saludables.
A partir de esta fecha, la Secretaría de Educación Pública (SEP) tiene un máximo de 180 días para actualizar las normas que rigen la venta y distribución en escuelas de alimentos y bebidas, preparados y procesados.
Las nuevas pautas establecerán los criterios nutrimentales a seguir en la elaboración de los alimentos, tomando en cuenta las recomendaciones de la Secretaría de Salud; deberán impulsar la venta de comida saludable y el consumo de agua simple potable.
Las normas deberán ser evaluadas y actualizadas al menos cada cinco años, según lo estipula el decreto de reforma, publicado el 20 de diciembre en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
Los gobiernos federal y municipales también tendrán que adaptar su legislación y regulaciones locales para hacer ciertos alimentos en las escuelas. Para ello, obtendrán gradualmente recursos federales.
“Las obligaciones que se generen con la entrada en vigor de este decreto quedarán sujetas a la disponibilidad presupuestaria de los ejecutores de los gastos para el ejercicio monetario vigente y los siguientes, por lo que los recursos se otorgarán progresivamente”, especifica el decreto.
Las reformas a la Ley General de Educación también prevén que el gobierno escolar difunda la prohibición de la venta y publicidad de alimentos y bebidas de bajo valor nutricional.
Aquellos que ocupen puestos de liderazgo en las escuelas serán culpables de hacer cumplir esta ley, mientras que el gobierno de educación y fitness controlará y castigará el incumplimiento.
La prohibición de la venta y publicidad será para los alimentos y bebidas procesados y a granel que no favorezcan la salud del alumnado o que la pongan en riesgo por su bajo valor nutricional.
Esta es la segunda reforma que prohíbe la comida chatarra en las escuelas. En diciembre de 2021, los parlamentarios aprobaron una modificación al artículo 50 de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes que también apoya la retirada de los ultraprocesados de las escuelas.
Además, en 2010 se crearon los Lineamientos Generales para la Venta y Distribución de Alimentos y Bebidas Preparadas y Procesadas en las Escuelas del Sistema Educativo Nacional, que implican qué alimentos posiblemente serían distribuidos en las escuelas fundamentales.
A partir de 2014, dichas normas son obligatorias y prevén sanciones. Sin embargo, esto no ha impedido la comercialización de productos de bajo precio nutricional en las escuelas.
Ahora, con la entrada en vigor de la nueva reforma, se ha elevado a categoría de ley la prohibición de la venta y publicidad de comida chatarra en las escuelas, que se espera que las escuelas cumplan.
Organizaciones civiles e investigadores de salud han celebrado la nueva ley al considerar que es estratégica para atender la alta prevalencia de obesidad infantil.
Visita otros sitios del grupo:
Financiación de las empresas
© 2023 TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS EXPANSIÓN, S. A. DE C. V.