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Alrededor de 25,000 direcciones de correos electrónicos y contraseños de empleados de importantes instituciones de salud fueron divulgadas en línea, de acuerdo con el Washington Post.
La diseminación de la información se da en medio de la batalla mundial contra la pandemia de COVID-19, una enfermedad respiratoria potencialmente mortal causada por el mencionado coronavirus. Se han reportado más de 2.6 millones de casos confirmados en todo el mundo y se cuentan más de 182,000 muertes en todo el mundo, de acuerdo con la Universidad Johns Hopkins.
La OMS, los CDC y el Banco Mundial, que supuestamente también fue afectado, no respondieron a una solicitud de comentarios. Los NIH declinaron hacer comentarios sobre el incidente, pero dijeron que «siempre estamos trabajando para asegurar la seguridad cibernética óptima para los NIH y tomamos la acción apropiada para hacer frente a amenazas y preocupaciones».
La Fundación Gates dijo que está monitorizando la situación. «No tenemos actualmente ningún indicativo de una fuga de información en la fundación», dijo la institución en un comunicado. El Instituto de Virología de Wuhan no ha respondido a una solicitud de comentarios al respecto.
CNET encontró versiones de archivo de parte de la información. De acuerdo con el Washington Post, un grupo neo-Nazi ha estado compartiendo la información en Twitter y alentando a la gente a que utilice los datos para hostigar a los empleados de las organizaciones afectadas. Twitter indicó que desactivará las URLs que intenten diseminar la información.