Sánchez sitúa en la mitad de mayo el comienzo de la “desescalada” y amenaza: “hay que dejar la puerta abierta a volver atrás”
El presidente del Gobierno Pedro Sánchez ha comparecido hoy en la sesión del Congreso de los Diputados en la que el Gobierno ha pedido convalidar el decreto de extensión del Estado de Alarma: «Es la tercera vez que pido, como presidente del Gobierno, esta prórroga pero es la primera en la que puedo hacerlo con un escenario futuro y prudentemente optimista», asegura. «Podemos diseñar el escenario de la desescalada. Hay que prorrogar la alarma porque hay que ser cautelosos”. “Seremos extremadamente cautelosos y prudentes en la desescalada”.
En su comparecencia ante el Congreso, el presidente del Ejecutivo ha fijado incluso un horizonte temporal, la segunda mitad de mayo, para empezar “la fase dos o desescalada”, aunque ha advertido que no ésta no será rápida sino «lenta y gradual, porque debe ser segura».
«En España hace días se ven tendencias positivas, que indican que hemos doblado la curva de contagios, hemos superado el momento crítico, el sistema de salud ha resistido, y la cifra de recuperados es motivo de esperanza. Pero no podemos bajar la guardia», ha afirmado el presidente.
El presidente asegura que «progresivamente se irá reduciendo el peligro» y de acuerdo con ello irán cambiando las condiciones del Estado de Alarma. «La desescalada va a ser lenta y gradual para que sea segura”. “Cada reducción de los contagios permitirá un avance. Debemos evitar los pasos en falso». «Si mantenemos a raya al virus y el sistema de salud mantiene el paso, avanzaremos, y si no es así, no”. “Hay que dejar la puerta abierta a volver atrás».
«Este es un gobierno que escucha y por eso proponemos el alivio del confinamiento de los menores. Es verdad, pecamos de prudencia, nuestros hijos lo son todo. Los expertos nos han pedido que lo hagamos con la máxima cautela».
El Real Decreto también habilita al Ministerio de Sanidad a modificar, a ampliar, a restringir, las medidas, los lugares, los establecimientos y las actividades permitidas. «Vamos a dar pasos adelante y pasos atrás según se comporte la pandemia en cada territorio», explica. Igualmente, el Ministerio va a poder delimitar el ámbito territorial. Sánchez asegura que ayuntamientos y provincias van a tener un papel «decisivo» porque seguramente las «unidades territoriales serán seguramente inferiores a los gobiernos autonómicos».
El presidente se ha felicitado por haber podido sumar a la mayoría de fuerzas políticas para discutir en una mesa «un escenario futuro, de unidad, fortaleza, diálogo y solidaridad». «Vamos a sentar las bases de un acuerdo a futuro y es lo mejor que podemos ofrecer al país. Del diálogo saldrá un futuro alentador. Condicionará las bases de una nueva forma de gobernar y hacer política».
Sánchez ofrece dos «garantías» para el acuerdo: «la culminación del acuerdo será un éxito de todos los que arrimen el hombro, no pueden ser patrimonializados por nadie”. “En segundo lugar, soy partidario de pactos de reconstrucción en los diferentes escalones de nuestra geografía, en cada comunidad, en cada ayuntamiento, gobierne quien gobierne, sin más exclusión que la de quienes se autoexcluyan». «Esta debe ser la legislatura del diálogo, y lo vamos a demostrar en los trabajos para el acuerdo de reconstrucción».
Sánchez también ha informado sobre el pasado Consejo Europeo de febrero, y ha asegurado que los planteamientos expuestos en España entonces «se han mostrado imprescindibles». El presidente insiste en que el presupuesto plurianual de la UE era «insuficiente» porque suponía prácticamente una congelación. «Un presupuesto ambicioso es hoy una condición indispensable, sin él no podremos responder a los retos. Tras la crisis del COVID necesitamos un presupuesto cuantitativa y cualitativamente diferente».
«La nueva realidad agravará y añadirá impactos económicos y sociales a los que la política de cohesión tendrá que dar respuesta para no dejar a nadie atrás», advierte Sánchez, que también ha criticado el presupuesto de la Política Agraria Común. «Dejamos clara nuestra negativa al recorte previsto y que la PAC sea como mínimo igual a la actual».
Sánchez asegura que el cuadro macroeconómico que se discutió en febrero es ya «papel mojado» y que se necesita ahora un «Plan Marshall». «Esperamos que del Consejo de mañana salga un primer consenso en línea con la posición de España”. “ Es imprescindible para que la Unión Europea merezca ese nombre».
El Gobierno de España ha pedido ayuda a la UE para relocalizar recursos y equipos médicos ante el «contexto de compra difícil y un mercado altamente agresivo». Y ha propuesto que regularmente la UE haga «tests de estrés» del sistema sanitario de los países miembros.
«Estamos ante un desafío histórico que nos obliga a una reconstrucción histórica» con medidas solidarias en la UE, subraya Sánchez, quien destaca las medidas del Banco Central y las medidas económicas tomadas por la Comisión. «El Gobierno reconoce la voluntad de las instituciones europeas”. No obstante, reclama mecanismos ambiciosos que demuestren que la Unión está a la altura. “No estamos solos en este empeño».
Sánchez advierte que las medidas que se tomen en España dependerá de que haya un «plan europeo». En el Consejo de mañana, España va a pedir que los instrumentos financieros estén listos para el 1 de junio como muy tarde. Además España ha propuesto un «gran fondo» de reconstrucción, explica Sánchez, que permitirían inversiones a fondo perdido, con una distribución de fondos dependiendo del impacto. Por último, España considera que el presupuesto europeo es prioritario.
«Se trata de un instrumento a la altura de la situación y que demostraría la voluntad de la UE. Se trata de reconstruir la casa, no solo apagar el incendio».
«Debemos salir del ritmo impuesto por la enfermedad y retomar la iniciativa política, sin descuidar nuestra defensa -dice Sánchez – Necesitamos prolongar el Estado de Alarma que ha sido la medida de protección más eficaz, y abordar los acuerdos nacionales y europeos para afrontar el futuro con esperanza».
«Pongamos en marcha todos nuestros recursos, todas las potencialidades”. “Cada enfrentamiento que alentemos, cada retraso que asumamos, será un lastre en los próximos años».