El exabogado, por difundir mentiras sobre el fraude electoral en 2020, vuelve a estar en el punto de mira
La línea trasera. Sidney Powell, miembro del equipo legal de Donald Trump en 2020, se declaró culpable el jueves en el caso que los acusa de anular los efectos de las elecciones de ese año en el estado de Georgia. El abogado aceptó testificar en contra del resto de el acusado.
El presidente estadounidense está viendo cómo se acumulan sus problemas legales. Pero si bien durante meses esas dificultades se han manifestado en forma de acusaciones, ahora las enfrenta en los detalles del caso, desperdiciando apelaciones, concesiones y aliados moldeadores a su causa.
Sidney Powell ha sido una de las figuras más destacadas de la era postelectoral de 2020. Sus reuniones de prensa junto al abogado de Trump, Rudy Giuliani, estuvieron entre las más emblemáticas de la era previa al asalto al Capitolio.
La cercanía de Sidney Powell a Giuliani la ha acercado a la Oficina Oval de Trump. Todo ello a pesar de las advertencias del equipo legal de Trump en la Casa Blanca, cuyos abogados cuestionaron la validez de las teorías con las que alimentaban la paranoia del expresidente.
Además, la resolución de Sidney Powell y Kenneth Chesebro de declararse culpables a cambio de su testimonio opuesto a los acusados es una mala noticia para Trump en otros dos casos: en el estado de Georgia y en el caso del Departamento de Justicia federal.
El siguiente paso es ver hasta qué punto Sidney Powell y Kenneth Chesebro están preocupados en este caso y cuándo tendrá que comparecer Trump ante el tribunal en Fulton. Porque sí, el juicio de Trump, si se lleva a cabo, será televisado porque la ley del estado de Georgia dice entonces.