La elegancia superior es conocida por su buen sabor y excentricidades, pero también por sus buenos modales, especialmente a la hora de comer. Para que no estés ‘desafinado’, te mostramos cinco tácticas de la elegancia superior para la hora del almuerzo.
Los buenos modales a la hora de comer son una tradición que se remonta a la Edad Media cuando los reyes y la alta burguesía organizaban banquetes que eran un acto social.
Desde entonces, reyes y consejeros han desarrollado criterios y manuales de conducta a los que los miembros de la alta élite debían ceñirse si querían adaptarse a su estatus.
«Y no les permitan tomar la pieza con las cinco manos de su mano, y no comer feo con su boca total, sino con una parte. Y las manos blancas se hagan con toallas y no con otra cosa como ropa, solo como algunos otros que no conocen la inexpresividad ni la buena apariencia», suplicaba el rey de Castilla, Alfonso X el Sabio, en el Código de Partidas.
Las normas de conducta han seguido evolucionando a lo largo de los años y ahora hay algunas que se imponen a la hora de comer para otras personas de las clases altas. Entre ellas:
Una vez que hayas tomado la toalla, deberás colocarla sobre tus rodillas; Es decir, en las piernas, donde puedes evitar manchas y estar a mano para usarlo después de cenar o tomar algo.
Si hay pan en la mesa, tendrá que dañarlo con las manos. Si bien es tentador darle un mordisco para verificar su crujido, querrá romperlo con las manos en pedazos pequeños que sean compatibles con su boca.
Si tienes la costumbre de cortar la comida antes de llevártela a la boca para que te sea menos difícil, te tenemos una mala noticia. Lo que te mereces es cortar solo el componente que te llevarás a la boca, en un manera diferente serás mal visto.
Las mantas se utilizan desde el exterior en
¿No estás seguro de cómo usar los cubiertos?No te preocupes, no lo hagas de afuera hacia adentro. Esto significa que el tenedor y el cuchillo que ubiques a la izquierda y a la derecha respectivamente serán los que uses para la primera mitad, mientras que los más cercanos al plato se utilizará para cortar la carne.
Si sigues comiendo, tendrás que dejar que los cubiertos descansen a los lados del plato, pero si has terminado, tendrás que poner el cuchillo y el tenedor en combinación dentro; De preferencia marcar seis horas y media.
A esos buenos modales se suman los de toda la vida, que son: no ponerse a cenar antes que el anfitrión, no beber antes ni después de masticar, y comer con la boca cerrada.