MADRID, 18 AÑOS (SERVIMEDIA)
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se acercó este miércoles al PNV para «lograr acuerdos muy positivos obligatorios tanto para el País Vasco como para el Estado en su conjunto» y bajo la presión de que él sea un «socio estratégico».
Así respondió Sánchez la consulta de revisión del ejecutivo del Congreso a la consulta del vocero parlamentario del PNV, Aitor Esteban, quien le recordó que algunos en el pasado siguieron acuerdos que no se han concluido.
Sánchez agradeció, «muchísimo», la ayuda del PNV para la remediación de los presupuestos generales del Estado (PGE) y le dijo que la «voluntad» del ejecutivo es «máxima y total» para concertar acuerdos entre los dos.
«Confíen en que nos tomamos en serio nuestros compromisos», respondió el presidente a Esteban, cuando el portavoz del PNV le puso varios problemas desagradables, como el traslado del TAV a las capitales vascas, que se acordó en febrero.
Según Esteban, el acuerdo sobre el TAV está «siempre» pendiente de firma por parte del ejecutivo y se pregunta por qué cuando se hacen públicos los compromisos, cuesta «tanto empujarlos».
Así, presiona que esta señalización -como otros gestos- sería «una señal de que hay voluntad» por parte del ejecutivo porque «los compromisos son vitales y los tomamos en serio». Insistieron en que «el movimiento se demuestra a través de la marcha. Sánchez, en tono muy conciliador, señaló que el PNV es un grupo «privilegiado y estratégico».