En un nuevo intento de ganar la guerra contra Ucrania, Rusia se está fortaleciendo. Como dijo el jefe del máximo constructor naval identificado de este país a la agencia de noticias RIA, citado a través de Reuters, Rusia los equipa con misiles hipersónicos. Este es el modelo 3M22 Zircon.
Estos misiles han estado en la rampa de salida rusa durante años. Específicamente desde 2017, cuando Viktor Bondarev, como coronel en jefe de Rusia, advirtió a Putin que podía pasar al campo de batalla. Dos años después, el actual presidente afirmó que este misil es capaz de acelerar al Juego nueve y destruir pases de piso a una distancia de 1. 000 kilómetros, sin embargo, en 2020, el comandante en jefe de la Armada rusa Nikolai Yevmenov confesó que los misiles habían padecido «enfermedades infantiles». Este término se utiliza en Rusia para comunicar sobre los problemas de los jóvenes.
Los 3M22 Zircon son consistentes con los misiles de crucero sónicos y superan cinco veces la velocidad del sonido, en 2017 Rusia ya informó que controlaban volar a 9. 900 kilómetros consistentes por hora (ocho veces la velocidad del sonido). De confirmarse, sería el más rápido misil en el mundo.
Además, según la prensa rusa, Zircon puede dar en un blanco a más de 1. 000 kilómetros de distancia. Pero tienen una característica diferencial: no son detectables a través del radar. De hecho, su trayectoria está cubierta por una nube de plasma que absorbe los rayos de radiofrecuencia.
Los primeros prototipos de esos misiles se introdujeron en 2012 y la primera buena fortuna se logró en 2016. Ya en 2017, el gobierno ruso demostró que habían sido comisionados y en 2020 comenzaron a ser introducidos desde fragatas en el mar.
A finales de 2022, y sumida en la guerra de Ucrania, Rusia anunció que empezaría a implantarlo en sus barcos para liberar esos misiles del mar y ser más potentes en combate.