«Buscado como parte de una investigación de delincuentes», indica el Ministerio del Interior en su base de datos de personas buscadas.
En marzo, la CPI emitió una orden de arresto contra Putin por supuestamente «deportar ilegalmente» a miles de jóvenes ucranianos de espacios del país controlados por Rusia.
Aunque Rusia no es miembro de la CPI, el riesgo de detención obstaculiza la política exterior de Putin.
Por ejemplo, el pasado agosto sí asistió a la cumbre de los BRICS en Sudáfrica y en septiembre sí pasó a la cumbre del G20 en India.
En mayo, Rusia incluyó al fiscal de la CPI Karim Khan en la lista de buscados.
La CPI acusa a Vladimir Putin y a la comisionada rusa para la infancia, Maria Lvova-Belova, de crímenes de guerra por la «deportación ilegal» de miles de niños ucranianos. Estas acusaciones son rechazadas a través de Rusia.