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El equipo de Fórmula 1 de Haas, de propiedad estadounidense, ha aplicado un ERTE a la mayoría de sus empleados con sede en el Reino Unido, lo que significa que ahora mismo la mitad de la plantilla de la Fórmula Uno ha adoptado medidas similares en respuesta a la crisis económica generada por la pandemia de coronavirus.
Previamente fueron McLaren, Williams, Racing Point, Alfa Romeo y Renault quienes ya habían despedido a parte de su personal y había acordado recorte salarial al resto de su staff técnico.
Siete de los 10 equipos tienen su base en Gran Bretaña, y sólo los campeones Mercedes y Red Bull aún no han anunciado reducciones salariales.
Bajo el esquema de permiso del gobierno británico, desde el 1 de abril los empleadores pueden reclamar el 80% de los costos salariales mensuales habituales de los empleados hasta 2.500 libras (unos 2.850 euros) por mes.
Los equipos de Fórmula Uno están actualmente en un paro obligatorio de la fábrica, adelantado desde agosto con la esperanza de utilizar el verano europeo para reprogramar algunas de las carreras aplazadas.
La temporada no ha comenzado aún, y los jefes de la Fórmula 1 están considerando una serie de opciones, incluyendo la celebración de carreras hasta el año nuevo si es necesario.