Advertisement
Supported by
La expulsión de un cachorro de un ejercicio de aventura permitió a los rusos expresar con seguridad su indignación y permitió al Kremlin distraerse de la guerra.
Por Anatoli Kurmanaev
La tragedia se apoderó de Rusia durante algunos días. Los legisladores federales convocaron a un comité especial y se puso en marcha una investigación mientras cientos de voluntarios buscaban a la víctima en medio de temperaturas bajo cero y los medios de comunicación estatales actualizaban las noticias en vivo.
Al final, la víctima, un gato llamado Twix, fue encontrada muerta.
La muerte de la mascota, a quien un trabajador arrojó por error de un tren de larga distancia, provocó indignación nacional y mostró los límites del alivio emocional y la necesidad del mismo en una Rusia en guerra.
Una encuesta nacional descubrió que aproximadamente dos de cada tres rusos conocían Twix, un porcentaje muy alto en un país donde otras personas están desconectadas de las noticias negativas, como la guerra en Ucrania, según Denis Volkov, director del Centro Levada, quien es la organización encuestadora independiente más grande del país y qué empresa realizó la consulta.
Una mezcla de propaganda, represión a la disidencia y fatiga de la población con respecto a la guerra que no concluye ha hecho que las curiosidades que surgen en internet se conviertan en un foco de atención nacional durante días, incluso semanas. El mes pasado, un video de un influente ruso que lanzó a su bebé de dos meses en un banco de nieve en una aparente acrobacia recibió miles de comentarios, negativos la mayor parte de ellos, y originó una investigación judicial.
Acontecimientos como la muerte de Twix, que en parte son catarsis y en parte una especie de teatro político, les han dado a los rusos la extraña oportunidad de desahogarse y vincularse con personas de ideas afines sin entrar en conflicto ni con la policía ni con los censores.
We are having trouble retrieving the article content.
Please enable JavaScript in your browser settings.
Thank you for your patience while we verify access. If you are in Reader mode please exit and log into your Times account, or subscribe for all of The Times.
Thank you for your patience while we verify access.
Already a subscriber? Log in.
¿Quieres todos los Times? Suscribir.
Advertisement