Liz Truss dimite como primera ministra británica

Lo dado se acabó. Liz Truss ya forma parte de la historia del Reino Unido tras confirmar su dimisión como Primera Ministra. Con solo cuarenta y cinco días en el cargo, se ha convertido en la máxima jefa de Gobierno efímera de la historia del país. Su ejecutivo, ya de carácter histórico por la La muerte de Isabel II, finaliza tras unos días repletos de reproches, acusaciones y un profundo departamento interno que amenaza con hundir a los «tories» en las próximas elecciones.

El líder ejecutivo británico estuvo en el blanco durante toda la mañana del jueves, con más de una docena de diputados conservadores presionando para expulsar a Truss. La causa final fue la ira monumental que tomó posición el miércoles pasado en el Parlamento, donde algunos eurodiputados llegaron aquí para denunciar insultos e intimidación física. se opuso a ellos para que no rompieran el campo de votación una votación sobre «fracking».

Como había advertido la mañana Antena 3 Noticias, el levantamiento interno de los conservadores se desarrollaba con el paso de las horas, obligando y presionando al alto mando conservador a derribar a Truss. Ella, consciente de que sus movimientos se derrumbaban, ha a pesar de todo aceptado la verdad. y asume que no podrá sacar adelante las reformas que el Reino Unido desea en este momento de su historia.

Una vez que se conozca y se asegure la renuncia de Truss, los conservadores tendrán que evaluar ahora cuál será el siguiente paso. ¿Convocar elecciones, nombrar un reemplazo? La primera elección se reclama a través de toda la oposición y también a través de componente de la bancada tory, ante el temor de que los dos años que quedan de legislatura sirvan para calmar el juego y que el caos acabe siendo mayor de lo que ya es.

Por otro lado, es imaginable que los conservadores nombren un nuevo primer ministro, que bien puede ser Rishi Sunak o Penny Mordaunt, los dos últimos rivales eliminados por Truss en las primarias, o algún otro como Ben Wallace, ministro de Defensa. , o el actual Ministro de Finanzas, Jeremy Hunt. Mientras se debate el próximo paso, los jefes más sensatos de los «Conservadores» se disfrazan de bomberos para apagar una chimenea que ha calcinado al Partido Conservador.

Truss, una vez mostró su renuncia, garantizó que seguirá siendo Primera Ministra hasta que se sepa lo que ocurrirá en Reino Unido. Sin embargo, asegura que no liderará a los conservadores, resolución que, según anunció, ya ha hecho. comunicó al rey Carlos III: «No puedo continuar con el mandato que se me ha encomendado a través del partido», ha dicho en una breve comparecencia en la que ha rehuído dar más puntos principales sobre su asamblea con el presidente del Partido Conservador. Graham Brady.

Solo habían pasado cinco minutos desde que la joven subió al vehículo y perdió el agua camino a su cita con su ginecólogo.

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