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Pablo Casado se ha propuesto hacerse ver en campaña y lo está cumpliendo. El presidente del PP volvió a recalar este miércoles en Euskadi para arropar a Carlos Iturgaiz en su carrera hacia la Lehendakaritza. Esta vez, visitó la empresa Zorelor de Vitoria para centrar su discurso en la industria y en la reactivación económica y donde, acompañado también por otros miembros del PP vasco, lanzó un aviso a navegantes: votar al PNV el 12-J, dijo, solo servirá para «apuntalar» a Pedro Sánchez en la Moncloa y «apoyar» la fiscalidad de Pablo Iglesias.
El líder del partido conservador, que luego se comió con los presidentes de Mercedes y Michelin, centró su crítica en la formación de Jeltzale, el principal partido que, según el PP cálculos, se puede tirar de los votos de las elecciones. Como resultado, Casado ha cargado toda su artillería dialéctica contra el partido liderado por Andoni Ortuzar: «Usted no va a ser capaz de decirme que me gusta de Iglesias en la política fiscal, pero Urkullu tendrá un tiempo difícil de explicar», ha advertido.
Casado también señaló que en el país Vasco de la economía «sufrido» mucho antes de que el Covid 19 de propagación de la pandemia en todo el mundo. Por esta razón, aseguró que fue «fundamental» para el uso de los impuestos de la capacidad de los tres Vasco áreas y el convenio económico para activar las medidas que las empresas pueden utilizar para reducir los impuestos con el fin de ser más competitivos. «Es extraño que el PNV gobiernos», dijo, «no actuar de esta manera, especialmente en los momentos de riesgo de subcontratación de las grandes empresas.»
Previamente tomó la palabra Iturgaiz, quien también cargó contra el PNV por «bendecir» al Gobierno de PSOE y Podemos que es, a su juicio, «una trituradora del empleo y la economía». «Urkullu forma parte de un tripartito letal para el futuro del País Vasco; no entendemos la miopía del PNV cuando se aferra a las recetas que se están comprobando inútiles para salir de la crisis», censuró.
Iturgaiz, además, tuvo que salir al paso después de que corriera como la pólvora por las redes sociales un vídeo suyo en campaña del pasado lunes donde, durante su intervención, se quedaba en blanco y repetía palabras, lo que derivó en especulaciones sobre su estado de salud. En realidad, Iturgaiz se desconcentró después de que hubiera personas que le gritaron frases como «Ensuciáis Euskal Herria, ‘peperos’ de mierda. Gora ETA!», además de ataques personales. «Es triste que todavía nos sigan insultando y amenazando los de siempre mientras hacemos campaña (…) Es lamentable lanzar bulos en redes manipulando lo allí ocurrido. Ladran luego cabalgamos», se defendió en Twitter.